El Museo Guggenheim Bilbao presenta la exposición Anni Albers: tocar la vista, un recorrido detallado por la obra de una figura pionera del arte textil, a lo largo de siete décadas. Realizada en colaboración con la Fundación Josef y Anni Albers, el itinerario de la muestra constituye una aproximación cronológica a la obra de Albers, a la vez que permite observar las conexiones entre periodos y series de trabajos diversos, dando cuenta de motivos e ideas recurrentes y realizaciones fugaces. La muestra refleja asimismo cómo, en el caso de esta artista, el material y las técnicas de trabajo preceden y guían a la idea y definen un desarrollo en cada caso.
La vida de Anni Albers (Berlín, 1899 – Orange, Connecticut, 1994) estuvo marcada por una gran intimidad con los materiales y las técnicas que guiaron su trabajo. Conocida especialmente por su papel pionero en el arte textil o fiber art, por sus innovaciones en el tratamiento de las tramas y por su búsqueda permanente de motivos y funciones del tejido, Albers fue una autora clave en la redefinición de la figura del artista como diseñador. El suyo fue un arte inspirado por el arte precolombino y la industria moderna, que trascendió las nociones de artesanía y labor propia del género femenino.
Anni Albers estudió en la vanguardista Bauhaus de Weimar, institución donde conocería a su marido, el pintor Josef Albers, y donde llegaría a dirigir el taller textil en 1931. Tras el cierre de la institución por el partido nazi en 1933, el matrimonio Albers se trasladó a Carolina del Norte, Estados Unidos, donde ambos fueron contratados como profesores de una escuela libre que se convertiría en referencia de la modernidad artística americana, el Black Mountain College. Desde allí, Anni Albers continuó combinando el trabajo pedagógico y la experimentación artística, a la vez que produjo algunos de los textos hoy considerados clave en el desarrollo del arte textil contemporáneo. Tras exponer sus colgaduras (―Wall Hangings‖) y tejidos pictóricos (―Pictorial Weavings‖) en numerosas muestras individuales (incluyendo el MoMA de Nueva York y otros museos norteamericanos entre 1949 y 1953, y el Massachussets Institute of Technology en 1959), Albers comenzó a explorar distintas técnicas de grabado en 1963.
En las múltiples técnicas de impresión gráfica, Albers encontró un nuevo espacio de investigación visual, que a partir de finales de los años sesenta reemplazó por completo a su labor relacionada con el tejer. A través de serigrafías, aguatintas, litografías y ediciones offset, la artista pudo perseguir por otros medios conceptos visuales que estaban ya presentes en muchos de los dibujos preparatorios de piezas textiles anteriores. Así encontró el elemento ideal para probar nuevos patrones compositivos y operar casi infinitas variaciones en ellos.
Durante las décadas siguientes y hasta el final de su carrera, Anni Albers realizó diversas colaboraciones con talleres y compañías de producción textil con las que buscó poner sus diseños al alcance del gran público, mostrando así su compromiso con el ideario perenne de la Bauhaus: entender las prácticas de arte y diseño como un solo campo, y producir prototipos que permitan una difusión igualitaria de las formas artísticas.
RECORRIDO POR LA EXPOSICIÓN:
Sala 305.
La primera sala muestra trabajos del periodo formativo de Albers en la Bauhaus, así como obras realizadas durante sus años en el Black Mountain College. La selección de piezas de la Bauhaus incluye dibujos preparatorios para textiles, así como numerosas muestras de su trabajo de investigación de nuevas tramas en tejidos simples y funcionales. En términos formales, esta sala permite observar la transformación de un esquema ortogonal predominante en el periodo inicial (décadas de 1920 y 1930), marcado por la influencia de la abstracción racionalista.
La presencia de la artista en la escena estadounidense, su participación en los diálogos que determinaron la modernidad de mediados de siglo, así como sus viajes junto a Josef Albers por México, Cuba y Perú (donde adquirieron muchas de las antigüedades precolombinas que inspiraron sus trabajos) van acompañados de una apertura emocional hacia la abstracción experimental. Así aparecerán esquemas que sucesivamente evocan paisajes (La Luz) o vuelven a la abstracción por medio de esquemas ya libres [Con verticales (With Verticals )]. Además, esta sala presenta una selección de las joyas que diseñó en sus años del Black Mountain College, otro ejemplo de la experimentación que reinaba en una institución que sería el paradigma de la libertad creativa y de la cooperación entre artistas durante sus años de existencia.
Sala 306.
Tras dejar el Black Mountain College, Anni se trasladará en compañía de Josef al área de New Haven en Connecticut, donde realizará muchas de sus obras de madurez además de formalizar sus teorías sobre el textil en escritos que hoy día son considerados fundamentales para entender la evolución del Fiber Art .
Así, esta sala ofrece una selección de bocetos, diagramas y fotografías asociadas a los desarrollos teóricos de Anni Albers. Estos se plasmaron de manera clave en su obra Del tejer (On Weaving), publicada en 1965 y cuya reedición ampliada en español y en inglés editada por el Museo Guggenheim Bilbao y Princeton University Press acompaña a esta exposición.
Por otro lado, la galería 306 cuenta con un gran número de tejidos pictóricos, obras únicas que retoman en clave moderna y abstracta la tradición de los tapices y en las que se puede observar la perfección formal del tratamiento de tramas y urdimbres por parte de Albers. En ellas, la artista se apropia de las preocupaciones que atañen a la pintura moderna y abstracta para llevarlas al terreno (más arcaico y fundamental) de la producción textil. También en esta sala puede verse la obra que cierra el periodo de producción de textiles de Albers, Epitafio (Epitaph).
Sala 307.
A partir de finales de la década de 1960, Albers consagrará todas sus energías a la investigación en los distintos campos de impresión gráfica, esencialmente serigrafías, litografías y ediciones offset. Buscando niveles mayores de complejidad gráfica que emparentan el dibujo con las densas tramas de tejido, aparecerán series como Domberger , donde proliferan los esquemas triangulares y romboidales. Estas formas se alternan con otras obras dominadas por líneas curvas e intrincadas que evocan laberintos, nudos y marañas de hilos. En ocasiones, estas se traducen en trabajos textiles producidos en grandes cantidades en colaboración con diversos fabricantes, una práctica que la Fundación Josef y Anni Albers ha continuado llevando a cabo de manera póstuma por deseo de la artista.
El discurrir paralelo entre la industrialización del producto textil y del objeto gráfico, y las posibilidades de democratizar el objeto artístico y borrar la separación entre arte y diseño, se hacen evidentes en este último periodo.
La serie de grabados Conexiones (Connections ) se presenta precisamente como una concisa sinopsis de los grandes hitos visuales en la obra de Albers. En todos los casos observamos la mirada táctil y emotiva (―touching‖) de Albers, su humanismo tranquilo, su búsqueda de pureza en la idea y claridad en la realización del trabajo.
DIDAKTIKA:
El proyecto Didaktika ofrece a los visitantes la posibilidad de complementar los contenidos de la exposición a través de espacios educativos y actividades especiales.
Espacio didáctico Anni Albers : Artista de convicciones
Localizado en el pasillo de la tercera planta, el visitante descubrirá en este espacio a una artista de profundas convicciones y cuya filosofía se basa en la educación experimental. Textos, videos y audios de la propia Albers se acompañarán de una muestra de materiales como los que ella empleó y que el visitante podrá manipular, con el fin de comprender el desarrollo del textil como disciplina artística y la modernidad de su obra, que abarcó desde el diseño de joyas ―anti-lujo‖ hasta los tejidos pintados, pasando por las telas murales, los dibujos y la obra gráfica.
Además, el espacio incluirá una actividad abierta a la participación de los visitantes vinculada con la producción textil.
Actividades
- Charla sobre Anni Albers (4 de octubre): Nicholas Fox Weber, Director de la Fundación Josef y Anni Albers, hablará sobre diversos aspectos de una de las pioneras del arte textil.
- Taller de diseño de joyas (7 y 9 de noviembre): Anni Albers conoció en el Black Mountain College al estudiante Alexander Reed y juntos crearon una colección de joyas anti-lujo con materiales inusuales como clips de papel, horquillas o tuercas.
En este taller de dos sesiones guiado por la diseñadora Matxalen Krug se emplearán objetos de uso doméstico de los años 40 interpretándolos en el diseño actual
- Taller de experimentación con textiles (25 de noviembre): impartido por la artista Teresa Lanceta, en este taller se explorará la forma en que Anni Albers trabajaba los materiales y experimentaba con el hilo metálico o el cobre para crear sus extraordinarios tejidos pictóricos o sus murales colgantes.
- Visita comentada a la exposición (25 de noviembre): la artista Teresa Lanceta interpretará una selección de obras de la muestra en un recorrido de una hora de duración.
- Reflexiones compartidas: visitas realizadas por profesionales del Museo para descubrir los entresijos del montaje y otros detalles interesantes de la exposición.
Visión curatorial (25 de octubre): Manuel Cirauqui, Comisario de la exposición.
Conceptos clave (8 de noviembre): Marta Arzak, Subdirectora de Educación e Interpretación.
*Patrocina Fundación Vizcaína Aguirre.
Además, se realizarán diariamente visitas exprés gratuitas para facilitar la transmisión de contenidos artísticos de una forma concreta y dinámica.
Imagen de portada:
Anni Albers en su estudio del Black Mountain College, 1937.
Fotografía: Helen M. Post
© The Josef and Anni Albers Foundation, VEGAP, Bilbao, 2017
Museo Guggenheim Bilbao
Área de Comunicación y Marketing
Tel.: +34 944 359 008
