Las termas de Caracalla
RESUMEN
La Termas de Caracalla son uno de los monumentos más importantes construidos en la época severa. Iniciadas por Septimio Severo, el fundador de la dinastía, fueron continuadas por su hijo Caracalla, a quien tradicionalmente se le atribuyen y finalizadas por Alejandro Severo, estando ya en pleno funcionamiento. Nacieron como las termas no aristocráticas de Roma. Ocupaban una inmensa extensión de terreno, con innumerables salas, recintos, jardines, bibliotecas, palestras… El acceso era libre y pronto se convirtieron en las más frecuentadas del Imperio. En ellas el emperador Caracalla albergó un gran número de esculturas aludiendo tanto a sus divinidades preferidas como a los dioses y héroes relacionados con el mundo salutífero y oracular. Cabe destacar también la presencia inédita de un santuario dedicado a Mitra en el subsuelo.
Este edificio visitado diariamente por casi 6000 personas, se convirtió en el escaparate perfecto de exposición de las preferencias religiosas del emperador, haciendo con ello partícipe al pueblo de Roma.
Un antiguo refrán romano decía para definir a un ignorante: “no sabe leer, ni nadar”. Esto nos da idea de la importancia que tenían para los romanos las termas. Desde los primeros siglos tenían bañeras particulares en sus casas y en sus villas, y en Roma había una piscina pública, que dio nombre a la XII Región, donde los romanos aprendían a nadar. En el siglo III existían en Roma 10 establecimientos termales públicos, 800 particulares y cerca de 2000 fuentes. Esta imponente cantidad de agua llegaba a la ciudad a través de 10 acueductos.
No es de extrañar por tanto que se recibiera con gran aclamación popular la nueva construcción de las Termas Antoninianas destinadas a ser las más fastuosas y a la vez más populares construidas hasta entonces.
Fueron iniciadas por Septimio Severo en el año 206 y continuadas por su hijo Caracalla, quien las inaugura en el 216, aunque algunas zonas se concluirían más tarde. Ocupaban un perímetro de 110.536 m2 y tenían capacidad para 1600 personas aproximadamente, procedentes de todas las clases sociales, desde la aristocracia hasta los esclavos y libertos, que podían acceder a ellas en diferentes horarios.
ISBN: 978-84-9714-011-9
Autora: Paloma Aguado García
Extensión: 20 págs.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.